Me importaba la cantidad de polvo, buscaba que el nubarrón de tierra me envolviera, que tras de mí se extendiera como hongo atómico. La tierra suelta esperaba la fricción para enfurecerse, me envolvía la boca y endurecía el cabello.
Pedaleaba tan rápido como podía. Una ves que alcanzaba la velocidad adecuada, giraba mis piernas en sentido contrario con todas mis fuerzas como intentando desandar lo ya avanzado, de la nada aparecía la nube de polvo tras mi rueda, eso me importaba, nunca pensé en la muerte como una sombra de mi bicicleta. ***
Ciudad de México.-El polvo lo cubre todo, “polvo somos y en polvo nos convertiremos” es la sentencia de nuestra existencia, la pintura blanca ha comenzado a tornase de un matiz pardo… el polvo lo invade todo.
La bicicleta fantasma es un monumento con llantas y rayos, una cruz con pedales y manubrio, recuerda lo vulnerable de sentirse libre.
Exigencia moral.
Han pasado 4 años desde 2009, fecha en que Bicitekas instaló la primera bicicleta fantasma en el DF en honor a Liliana Castillo, ilustradora de 23 años fallecida mientras cruzaba con su bicicleta las rayas blancas que indican cruzar con precaución.
Las bicicletas fantasmas se comenzaron a instalar para señalar a la sociedad y a las autoridades que una persona a muerto por falta de cultura y respeto vial. La Bici blanca rinde tributo al caído en bicicleta y alerta sobre el peligro del lugar para evitar más accidentes.
Para recordar a Liliana, se creo esta fundación donde se muestra su obra como ilustradora y las historias que rodean a su Bici Fantasma.
El uso de la bicicleta en las ciudades se ha exponenciado al igual que la intolerancia de los automovilistas hacia un modo de transporte diferente. En una ciudad donde el caos y el hacinamiento reinan, la disputa por los espacios deja como saldo bajas numerosas solo del lado de uno de los bandos.
El antecedente directo de las Ghost Bikes, fue la Bike Angel, una bicicleta blanca con grandes alas suspendida en la entrada del túnel Stockton en San Francisco, California en 2001. Dos años más tarde, en 2003 apareció la primera Ghost Bike en en St. Louis, Missouri. En la actualidad 90 ciudades participan en este movimiento, entre las cuales se encuentran el DF, Guadalajara, Monterrey y Querétaro.
Como cualquier cosa inerte que perturbe el paisaje cotidiano e incite a cuestionarnos, las bicis fantasmas han ido desapareciendo con el tiempo, algunas han sido retiradas por las autoridades y otras más luchan por sobrevivir al olvido y al polvo, el polvo que se mete por todos los poros y nos hace olvidar.
Texto y Fotografía por Noé Cortés